La logística en el sector de la automoción es un área clave de la cadena de suministro repleta de desafíos y oportunidades. La complejidad intrínseca de sus mecanismos, unido a las altas exigencias de calidad y a la presión por reducir costes, hacen de esta una actividad que, cada vez más, requiere de una gestión eficiente y adaptativa.
De acuerdo con la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) en España, el sector automotriz es el segundo más importante en el país, representando el 10% del PIB industrial y siendo responsable del 18% del total de las exportaciones españolas.
Además, el sector emplea a más de 280.000 personas y es el primer inversor en investigación y desarrollo, destinando a este fin una media de 4.000 millones de euros anuales.
Sin embargo, detrás del éxito de esta industria se esconde otra sin la cual estas cifras se volverían inalcanzables: la logística. En ella está, precisamente, uno de los motores que han hecho posible que España sea el segundo mayor fabricante de vehículos en Europa y el noveno a nivel mundial requiere de especial atención.
¿Qué es la logística automotriz?
La logística automotriz es el proceso de planificación, implementación y control de la gestión de la cadena de suministro en la industria automovilística. Se enfoca en garantizar que los componentes y materiales necesarios para la producción de vehículos estén disponibles en el momento y lugar adecuados, así como en la entrega de los vehículos terminados a los clientes.
En este sentido, implica la gestión de una red compleja de proveedores, fabricantes, subcontratistas y distribuidores, así como el transporte, almacenamiento y manipulación de los componentes, materiales y vehículos terminados. Además, incluye la gestión de los procesos de compra, inventario, producción y distribución de los productos automotrices.
Así, la logística automotriz se ha convertido en una pieza fundamental para garantizar la eficiencia en la cadena de suministro, la calidad de los productos y la satisfacción del cliente.
¿Qué retos plantea?
Según un informe de PwC, la logística representa el 10% del coste de producción de un vehículo en Europa. De ahí que muchos, a la hora de plantear un cambio estratégico, pongan el foco en la logística, concretamente en los retos que plantea.
- Gestión de proveedores. El 70% de las empresas de automoción tienen más de 100 proveedores, mientras que el 30% restante puede llegar a superar los 500. La gestión de una amplia red de proveedores y subcontratistas en diferentes partes del mundo puede ser un desafío en términos de coordinación y seguimiento de los estándares de calidad, plazos de entrega y costes.
- Cadena de suministro compleja. La cadena de suministro de la industria automotriz es compleja debido al gran número de componentes y subconjuntos que se utilizan en la producción de un vehículo.
- Variabilidad de la demanda. La demanda de vehículos puede variar según las condiciones económicas y la estacionalidad, lo que puede ser un desafío para la planificación de la producción y la gestión de inventarios.
- Innovación tecnológica. La rápida evolución de la tecnología en el sector automotriz, como los vehículos eléctricos y autónomos, plantea nuevos desafíos en términos de logística, como la gestión de nuevas fuentes de energía o la producción de vehículos con nuevas especificaciones.
- Ecologismo. La sostenibilidad es un desafío creciente en la industria automotriz y cada vez son más las empresas que implementan prácticas sostenibles en toda su cadena de suministro. En la actualidad, el 62% de las empresas del sector están implementando prácticas sostenibles en la gestión de su cadena de suministro.
¿Cómo se puede garantizar una logística automotriz de 10?
Garantizar una logística automotriz de 10 puede ser un desafío, pero hay algunas prácticas y estrategias que pueden ayudar a lograrlo.
- Planificación y gestión efectivas de la cadena de suministro. Es fundamental contar con una planificación y gestión efectivas de la cadena de suministro, lo que implica una coordinación y comunicación eficiente entre todos los actores involucrados en la cadena de suministro, desde proveedores hasta clientes.
- Implementación de tecnología avanzada. La implementación de tecnología avanzada, como el uso de sensores y sistemas de seguimiento en tiempo real, puede ayudar a mejorar la eficiencia y la transparencia de la cadena de suministro, lo que permite una mejor toma de decisiones.
- Alianzas estratégicas con proveedores. Las alianzas estratégicas con proveedores pueden ayudar a reducir costes, mejorar la calidad y garantizar la disponibilidad de los componentes y materiales necesarios en la cadena de suministro.
- Capacitación y formación del personal. Este es fundamental para garantizar que los trabajadores estén actualizados en las últimas prácticas y tecnologías de la logística automotriz, lo que puede mejorar la eficiencia y la calidad del servicio.
- Medición y análisis de los resultados. La medición y análisis de los resultados son fundamentales para identificar áreas de mejora y optimización en la cadena de suministro, lo que permite una toma de decisiones basada en datos y una mejora continua en la logística automotriz.
En suma, cada uno de estos factores respalda la necesidad de contar con expertos en este nicho repleto de desafíos de los cuales, como comentamos anteriormente, una compañía especializada en logística automotriz puede extraer valiosas oportunidades, mejorando la eficiencia, reduciendo costes y aumentando la calidad mientras facilita la adaptación a los cada vez más frecuentes cambios del mercado.